Párroco del Sagrario, en 1887 se posesionó de la canongía de oficio penitenciario de la Catedral de Almería. Profesor de religión del Instituto de Segunda Enseñanza.

      Conservador, ultramontano y polemista, participó en la creación de varios periódicos y colaboró en otros: con Bolea y Sintas fundó y dirigió El Cruzado, rival de El Observador, ambos de tendencia carlista; redactor y colaborador de El Ferrocarril, Diario de Almería y El Semanario Popular. En su tiempo era considerado como “periodista batallador” y hombre de copiosos conocimientos, sabia erudición y brillante inteligencia.

      Entre sus publicaciones citamos los numerosos artículos en prensa de fondo histórico, por ejemplo ”Tradiciones almerienses”, ingeniosos pero fantásticos relatos sobre la imaginaria entrevista del Rey Católico con el Zagal; de carácter religioso, Compendio de Religión Moral, Explicación de la Doctrina Cristiana y La peregrinación al Saliente de 1878, que fue duramente criticado por la Revista de Almería, de tendencia cientifista y positivista.