 |  | | Sí se me preguntara por qué he escrito este puñado de páginas, no sabría qué responder. Es cierto que hay múltiples razones: mi estancia en Alhama durante catorce años trabajando en el punto neurálgico de la administración más cercana, mi intervención directa en la creación de algunos de los símbolos alhameños, mi apego a estas ciencias casi desconocidas que tratan de escudos y banderas… en fin, algunas razones por encima de las cuales prevalece mi afecto por Alhama y sus gentes.
Únase a ello el apoyo, siempre afectuoso de María del Carmen Amate, historiadora incansable de su pueblo, de su historia y de su gente.
Ella me anima a plasmar sobre el papel mis vivencias alhameñas y con ello me anima también a ocupar mis momentos de ocio y de recuerdo.
Fruto de ello es esta gavilla de páginas – apenas un cuaderno infantil - ; un folleto que puede animar a historiadores y estudiosos de fuste a indagar en los entresijos de ese pueblo blanco y verde. Como yo lo vi en su bandera.
Pese a lo exiguo de su volumen estas páginas contienen, en lo técnico, el rigor de estas disciplinas de raros nombres (Heráldica, Vexilología, Sigilografía o Protocolo) con las que están relacionadas. Eso es cierto, pero no lo es menos que rezuman cercanía con las gentes con las que conviví y se asoma a ellas la nostalgia de un tiempo pasado. Perdón por esa mescolanza que me resulta inevitable cuando de Alhama se trata.
Quede para la historia íntima de Alhama de Almería que sus símbolos esenciales: escudo, himno y bandera, nacieron a la vida administrativa y a la comunidad alhameña bajo las alcaldías de José Alonso Gómez, Francisco Manuel Ruiz Orta y Cristóbal Rodríguez López, respectivamente.
Gracias por hacer públicas estas letras y gracias por leerlas. Van dirigidas a los alhameños a quienes considero casi paisanos.
Miguel Navarro Gámez.
Edita: Asociación cultural "El Eco de Alhama", con la colaboración del Ayuntamiento de Alhama de Almería, el Instituto de Estudios Almerienses y la Diputación de Almería. | |