Antonio NAVARRO SÁNCHEZ DE ÚBEDA


NAVARRO SÁNCHEZ DE ÚBEDA, Antonio (Canjáyar, 1888 - Almería, 1954). Médico, político, intelectual y poeta modernista.


Nacido en la villa de Canjáyar, en el seno de una familia piadosa, hijo de Antonio Navarro Esteban -abogado e historiador de las Alpujarras- y de María Sánchez Sánchez. Siempre tuvo mucho afecto a su villa natal y fue fiel a la Santa Cruz del Voto.

Tras graduarse como bachiller en Granada en 1907, ingresó en el Cuerpo de Administración de Aduanas del Estado, instalándose en Madrid como primer destino en 1910, siendo su último destino Almería, como Jefe de Negociado y Recaudador de la Aduana de la misma ciudad desde 1945 hasta la fecha de su fallecimiento.

Su espíritu crítico, su intelectualidad y su afición al estudio y a la literatura lo llevaron a ingresar en el Ateneo Científico, Literario y Artístico de Madrid en 1913. En el mismo desempeñó varios cargos, como el de secretario de la sección de Ciencias Exactas Físicas y Naturales en 1919 y de la de Medicina en 1923.

Su carácter humanista le llevará a iniciar la carrera de Medicina, licenciándose con éxito en 1919 y siendo nombrado médico interino de la villa de Canjáyar en el mismo año. En 1922, se doctora en Medicina y Cirugía con la Memoria que lleva por título “Medicina y Matrimonio”, rodeándose de la élite de la medicina madrileña (entre ellos, por el doctor Gregorio Marañón) en la defensa de esta en el Ateneo. Además, fue publicada en la revista científica Higia en el número de marzo del mismo año. La memoria de doctorado representa un completo y elaborado debate clínico y ético de carácter progresista en defensa de los derechos médicos y civiles de la mujer.

Desde 1926 a 1939 compatibilizará su trabajo en la Dirección General de Aduanas con el ejercicio de la medicina en Madrid. Destaca su compromiso profesional como medico de confianza del marqués del Genal, don Enrique Crooke Larios, al cual asistió personalmente durante su larga enfermedad de 1935 a 1937.

Su pensamiento liberal, en medicina y en política, le conducen a afiliarse al Partido Republicano Conservador de Niceto Alcalá Zamora, participando así en el Bienio Social-Azañista, uno de los puntos culminantes de la evolución histórica de España durante la época contemporánea. Su valía personal, laboriosidad y aplicación, le conducirán a ser nombrado gobernador civil de Castellón de la Plana en 1933, cargo que ejerció intermitentemente hasta su dimisión en mayo de 1936, a consecuencia de las públicas desavenencias con el Frente Popular. En este sentido Eladio Guzmán Hernández, en su obra Pueblos del Andarax señaló que “los embates rudos y despóticos de la corrupción no conmovieron ni dominaron su espíritu, cuajado y amasado bajo las esencias y los claveles del soberano ambiente del valle del Andarax”.

Fruto de su talante cultivado, escribirá numerosos sonetos, algunos de ellos inéditos y otros publicados en la prensa almeriense bajo su autoría o su pseudónimo, “Luis de Vargas”. Los mismos reflejan su bohemia ordenada y su elevado sentimiento estético, enmarcándose en la corriente modernista. Son poemas de evocación romántica hacia su villa natal, en particular a su casa familiar de Canjáyar, “Villa María”, a su mujer, Soledad Gómez Campana o a su único hijo, Antonio, destacando aquellos que describen escenas, paisajes y retratos de personajes almerienses coetáneos a su época. Sin embargo, el siempre afirmó que sus versos no tenían valor ya que era “médico y nada más que médico”.

En definitiva, puede afirmarse que aplicó firmemente la célebre frase de su colega el doctor Marañón, “vivir no es sólo existir, sino existir y crear, saber gozar y sufrir, y no dormir sin soñar”.



García Navarro Teresa,Navarro del Águila Teresa





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