Tomás MARTÍNEZ RODRÍGUEZMARTÍNEZ RODRÍGUEZ, Tomás (Alhama de Almería, Almería, 1911 - Almuñecar, Granada, 1990). Empresario, banderillero y director de Escuela Taurina.
Creó la primera escuela taurina reglada y fue
ejemplo para alumnos, afición y compañeros. Tomás Martínez Rodríguez Chatillo
de Almería nació el 8 de abril de 1911 en el seno de una modesta familia
de jornaleros de Alhama. Siendo un crío conoció a Relampaguito,
a la sazón concejal de aquel municipio y al que debía un consejo crucial
en su futura carrera: “Este oficio (el de matador de novillos/toros) es
muy difícil, casi misión imposible. Lo más conveniente es que si no destacas
desde el principio te pases a banderillero; ahí el porvenir es más halagüeño
y podrás comer con dignidad”. Su vaticinio se cumplió, convirtiéndose
en seguro y buen conocedor de los entresijos de la lidia. El ir a las órdenes
de Pepe Luis Álvarez, Rafael Martín Vázquez, Juan Posadas, Enrique Vera
o Manolo González corrobora su categoría. O bien asesorando a becerristas
locales emergentes, caso de Ramón Magaña y José Antonio Martín.
A los once años la familia se trasladó a la capital. Puesto en contacto
con el efervescente mundillo taurino, pronto adquirió los conocimientos
necesarios que le facilitaron el debut. El mano a mano con Mariano Rodríguez
la tarde del 17 de agosto de 1930 da antigüedad a su presentación sin picadores
en Almería; continuando su formación en Villa Rosa, oficiosamente primera
escuela taurina local, a cargo de José López “Iguiño”. En esta tesitura
se produjo el alzamiento militar rebelde y Tomás Martínez se mantuvo fiel
a la República, sufriendo en la posguerra un juicio militar sumarísimo.
Acusado de “auxilio a la rebelión” por su pertenencia al Partido Comunista
y UGT, es condenado a 12 años de prisión (conmutados a seis) y desterrado
a Granada. Tras padecer condena e inhabilitado civilmente, rehízo su vida
en 1945 al contraer matrimonio en la vecina ciudad con Dolores Salinas,
del que nacieron dos hijos. Alternó el barrio albaicinero con Almería,
en la que abrió un modesto negocio de artesanía andaluza. Curtido en mil
batallas, se mostraba especialmente orgulloso de sus años de profesor titular
de la Escuela Taurina del Frente de Juventudes, dirigida administrativamente
por el radiofonista Francisco Bernabéu “Pacorro” e inaugurada con un
festival en mayo de 1961. Ahí Tomás supo inculcar a la chavalería los valores
éticos que él mismo encarnaba: honradez, educación, generosidad… Ganándose,
pese a la disciplina impuesta, el cariño y respeto de los matriculados.
En abril de 1988 la peña Jueves Taurinos le brindó un merecido homenaje,
a la par que Pepe Nieto y Miguel Rodríguez Algarra le compusieron un pasodoble.
Veraneando en su casa de Almuñécar le sobrevino un accidente cardiaco mientras
aguardaba su venida a Almería para ejercer de asesor artístico en el palco
durante el abono ferial de 1990. El toro negro de la muerte le infirió
un fatídico cornalón y el 13 de julio fallecía.
Sevillano Miralles Antonio