Ibn Abí Háshim (el descendiente de Abú Háshim) era el apodo por el que fue conocido Abú l-Qásim Áhmad, que pudo hacer referencia al sobrenombre de paternidad de alguno de sus antepasados. De estos conocemos solo a dos: su padre Jálid y su abuelo Yazid. Llevó el gentilicio árabe correspondiente a los Banú Ásad, aunque no sabemos si por ser árabe o por relación de clientela.
Estudió con el jurisconsulto Fadl b. Salama (m. 931), uno de los primeros maestros de Pechina, y con el tradicionista de Elvira Muhámmad b. Futays (m. 931), por lo que debió de contar con una buena formación en derecho y en tradiciones islámicas. No consta que ampliara esa formación en Oriente.
Estuvo encargado de la oración y del sermón en la Mezquita Aljama de Pechina, cargo que debió de desempeñar hasta su muerte.
Conocemos de forma precisa su fecha de fallecimiento (el martes 6 de mayo del 979) porque en su tumba se puso una inscripción que la indicaba y que leyó su biógrafo cordobés Ibn al-Fáradi cuando pasó por Pechina a finales del siglo X, antes de embarcar en el puerto de Almería hacia Oriente. No se ha encontrado esa lápida.
Bibliografía:
IBN AL-FÁRADI (1989), Tarij, ed. al-Abyari, El Cairo, I, 102 (nº 151).