Hasta hace un trienio la farmacia Durbán ocupó los bajos del edificio en Puerta de Purchena calle Regocijos construido en 1925 por Guillermo Langle atendiendo a un encargo de Carmen Algarra Muñoz, viuda de Quesada. A comienzos de los sesenta del siglo XIX, José Quesada Gómez –bisabuelo de Juan José Durbán Pérez, último farmacéutico titular (desde 1983)- ya dispensaba medicamentos frente a la iglesia de Santiago, trasladándose hacia 1880 al tradicional enclave. Al fallecer el 14 de enero 1903 en su finca de Viator, la viuda contrató al regente José Gallego Santaella, a la espera de que su hijo, José Durbán Quesada, concluyese la licenciatura de Farmacia en Granada.
En 1928 fue designado presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos. Y junto a su hermano Francisco, químico, fundó Laboratorios Durbán -separados posteriormente en razones comerciales diferenciadas-, con fábricas en Carrera Alhadra y calle Santos Zárate. Como principal patente terapéutica a ellos se debe el famoso antidiarreico Tanagel, de consumo internacional. Cofundador de la entidad distribuidora de medicamentos Hermandad Farmacéutica Almeriense, en la céntrica farmacia –bellamente alicatada de azulejos, botería decimonónica y muebles de época- instaló un laboratorio de análisis clínicos pionero en extracciones de sangre, metabolismo basal y novedosas pruebas diagnósticas. Fue el primero en Almería en realizar test de embarazo (Galli Mainini) a partir de la inoculación/reacción de ranas conservadas en su chalé de Ciudad Jardín.
La farmacia de Durbán era contemporánea a las de Santo Domingo (plaza Virgen del Mar), Vivas Pérez (Paseo) o La Bola (calle Real). Tras más de centuria y media al servicio de la sanidad almeriense, en 2018 el emblemático establecimiento cerró definitivamente sus puertas.
Casado con María Pérez Rodríguez y padre de tres hijos, José Durbán Quesada falleció en 1982. Tapia Garrido cita a Felipe como el mancebo más antiguo y solicitado por la clientela dados sus conocimientos terapéuticos para cada ocasión y enfermo. A este hay que sumar otros más recientes e igualmente acreditados como Antonio Ferrer, Ramón Granados, Pepita Ruescas, Juan Pérez, Antonio Luis Miras, Francisco Álvarez o Miguel Castillo. Además de experimentados profesionales al servicio del laboratorio de análisis clínicos: Pura Granados, Carmela Campos, Antonio Gutiérrez Buforn y Esteban de Haro.