La población de personas mayores está en aumento. Las previsiones son que el segmente de población de la edad más avanzada”, los 85 años de edad o más, están en camino de crecer un 2,8% entre 2010 a 2030. Debido a la disminución de las tasas de fecundidad y mortalidad, nuestra media de edad va en aumento y el porcentaje de la población mayor de 65 años ha aumentado considerablemente. Además, esta generación tiene acceso a una buena atención médica, y la necesidad de servicios de cuidado de los ancianos en los próximos 20 años no va a hacer más que aumentar.

Por ello es que los servicios y negocios asociados a la edad sin duda son una apuesta de futuro.
 

Muchos europeos buscan destinos atractivos donde vivir durante su jubilación y en ese aspecto España es uno de esos lugares preferidos. Es muy conocida la predilección de muchos ciudadanos europeos por España como destino para sus vacaciones y, según algunos estudios, para muchos de ellos sería un buen destino para vivir después de jubilarse. Es así como en los últimos 20 o 30 años ha aumentado considerablemente el número de extranjeros que eligen España para vivir durante su retiro y en particular en las zonas de costa, principalmente en el Mediterráneo.

Esta población requiere de una serie de servicios adaptados a sus necesidades y son muchos destinos a nivel mundial que se han especializado en este segmento de la población y destacan por la calidad de su oferta.
 

En Almería se cuenta con excepcionales condiciones para el desarrollo de este tipo de servicios. La provincia no tiene nada que envidiar a reconocidos destinos mundiales de este sector. El buen tiempo, los bajos costes, las infraestructuras sanitarias, la cualificación y dedicación del personal. Por ello Almería puede resultar un destino muy competitivo para ofrecer servicios de este tipo en el contexto europeo.

Almería puede aprovechar la oportunidad de acceder a este mercado e incluso intentar posicionarse como un referente.

El ámbito de este tipo de servicios es muy amplio, ya que van desde el sector inmobiliario, residencias para mayores, servicios sanitarios especializados, asistencia en el hogar, ocio, alimentación, productos especiales para mayores, bienestar y cuidado personal, así como una extensa lista de otros diseñados específicamente para esta población.